El florecer de las voces jóvenes

Por el centro del valle, el río Cartama arrastra su voz de siglos. Ha visto pasar los días de decenas de generaciones, el ir y venir de sus faenas, el pulso de las cosechas, el temblor de las manos que han buscado desde hace siglos asentarse en esas tierras. Hoy en día, entre sus riberas, voces jóvenes reescriben el territorio: dibujan en los muros, recitan en las esquinas, cantan en los parques, dan vida a la memoria tallada sobre las piedras.

En este nueva versión del Jardín de las Ideas, una de las franjas del Hay Festival Jericó, invitamos a jóvenes provenientes de Fredonia, Jericó, Montebello, Pueblorrico, Santa Bárbara, Támesis, Valparaíso y Venecia a que nos compartieran un poco de sus búsquedas artísticas y culturales y a que juntos proyectaran futuros para el territorio que comparten.

Cartama, ahora convertido en un distrito, no es solo un mapa de montañas, ríos y límites municipales. Es un territorio que constantemente busca formas de narrarse. En las noches tibias, bajo los faroles de los pueblos, se gestan proyectos de transformación, pero también de conservación. En medio de cafetales y otros cultivos, crece también la poesía, el teatro, la música, como una nueva cosecha que da el valle.

Y así, en el latido verde del Cartama, las voces jóvenes florecen. En el Jardín de las Ideas, nos gusta ayudar a que sus palabras se convierten en caminos, en relatos que circulen por todo el valle y que viajen más allá de las montañas que las vieron nacer. Estos jóvenes que fueron elegidos no solo por su talento, sino por su urgencia de decir, de contar, de transformar con la palabra el territorio que habitan, llevan consigo la certeza de que la lectura, la escritura y la palabra hablada son medios que unen lo cercano con lo lejano, lo íntimo con lo universal.

Mapas vivos: Narrativas y cartografías del Valle del Cartama con Compás Urbano

Sobre el territorio que pisamos se levanta un territorio imaginado, el territorio que va siendo dibujado por nuestras vivencias y aquel que soñamos que llegue a ser. En este territorio, que compartimos con otros, todos tenemos referentes comunes, objetos que se naturalizan hasta que se vuelven distintos en los ojos de los demás. A una de las participantes de este ejercicio de cartografía le sorprendió, por ejemplo, que las arepas de chócolo que ella come de manera cotidiana signifiquen algo tan distinto para las personas que viven tan cerca de ella. Y así con cada cosa que compartimos. Lograr conciliar las visiones distintas sobre el espacio que habitamos no es sencillo, hasta que se escriben las historias que nos hacen sentirnos parte de la misma trama.

Del mondongo al ojalá: Bocafloja en conversación con Daniel Rivera

El arte es una forma de mostrar la influencia que tiene el territorio en nosotros, pero también de defenderlo. Crear desde el suelo que pisamos es una oportunidad para hacer proyectos artísticos y culturales que tengan un sustrato ideológico distinto de la ideología dominante, una propuesta que le haga contrapeso. Una propuesta que hable desde lo local, lo decolonial, así como el proyecto que representa Bocafloja, artista mexicano, quien estuvo conversando con los jóvenes sobre sus búsquedas y luchas.

Taller Cartas a la tierra natal. Escritura epistolar con Carolina Calle

"Repasar el origen, mirar en cámara lenta a la tierra natal, desmenuzar el pasado, detenernos en el presente, tocar fondo y agarrar la raíz, dejar salir las palabras que traemos guardadas, escribir un buzón de amores, quejas y reclamos a un territorio". Así describe Carolina Calle el propósito del taller con el que nos invitó a escribir carta a nuestra segunda madre.

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Otras actividades del Ecosistema del Libro y la Lectura

Además del Jardín de las Ideas, el Ecosistema del libro y la lectura tuvo presencia en el Hay Festival Jericó 2025 con otras actividades:  

Presentación del libro Voces en la sala

Hace falta aprender a escuchar lo que dicen tus coterráneos. La dramaturgia es buena en ese sentido porque siempre te propone leer diálogos, meterte en conversaciones. Emmanuel Restrepo, reconocido actor, quien nos acompañó en la presentación del libro Voces en la sala, nos invitó a ⁠leer dramaturgia con otros. Según él, pocas veces se piensa la lectura compartida y leer teatro es una oportunidad para eso. La dramaturgia te ayuda a afinar el oído para escuchar con mayor gusto y atención lo que se dice en las calles. Poder ver las obras de teatro que están sucediendo todo el tiempo a nuestro alrededor nos ayuda a entender cuáles son nuestros dramas y aspiraciones colectivas.

Encuentro de lectores con autores

La madre de Melba Escobar le manifestaba, según ella, una de las mejores formas del amor: era su lectora y correctora más rigurosa. Seguía buscando errores incluso después de que el libro ya había sido impreso y estaba circulando por el mundo. Esta historia la contó Melba ante un grupo de lectores y lectoras que leyó Las huérfanas, su última novela.

La obra es una excavación íntima en la memoria de su madre, Myriam De Nogales, una mujer brillante y herida que vivió atormentada pero que en su vejez alcanzó la paz consigo misma. Entre suicidios, identidades femeninas y la transformación personal, este libro busca darle cuerpo de nuevo a la muerta que más vive en la autora, la misma que, antes de morir, le dijo: “Ojalá este sufrimiento te sirva para escribir una buena novela”.

En el encuentro con Melba, los y las lectoras se mostraron muy asombradas por lo que se narra en la novela hasta el punto de dudar entre qué es real o ficticio, a lo que la autora respondió que todo es real, claro, hasta donde es posible usar esa palabra. Entonces aprovechó para recordar que todos recurrimos a la ficción para construir nuestras versiones de los hechos.

Otro grupo de lectores recibió la visita de Catalina Gómez Ángel, reportera de guerra que lleva más de una década cubriendo el conflicto armado en Oriente Medio y otros lugares del mundo. Ella nos contó que su motivación para trabajar en este campo fue contar las historias de vida de las personas que sufren las consecuencias de la política internacional.

Esta autora impactó a los y las asistentes con su valentía para contar la guerra en medio de tanto peligro. Ella insistió con la idea de que conocer tan de cerca lo que está pasando en otros países le permitido observar cómo en nuestro país está en curso una situación similar, pero para muchos es invisible.

Muestra de editoriales independientes

Desde diversas latitudes, los libros viajaron hasta el #HayJericó25. La muestra de editoriales independientes le ofreció a los lectores la bibliodiversidad de Latinoamérica. Pilar y Manuela, libreras de la Librería La Pascasía, dispusieron una selección de libros que expandieron nuestras visiones locales, que nos mostraron qué compartimos con otros, pero también en qué somos diferentes.

Punto de venta de Lectura Comfama

Lecturas Comfama hizo parte del Hay Jericó 2025 con un stand lleno de libros que encontraron nuevos lectores. Las palabras abrazan, un título que recoge conversaciones durante la pandemia, fue el título más vendido del sello editorial, lo que confirma el poder de la lectura para conectar con temas de actualidad. Como novedad, llevamos Voces en la sala, un libro que cobró vida en las franja de conversaciones del evento. Con esta participación, seguimos ampliando horizontes, acercando nuestras publicaciones a nuevos públicos y fortaleciendo el proyecto editorial en espacios donde el libro es el centro del encuentro y la inspiración.

Biblioteca móvil

La Biblioteca Móvil de Comfama desplegó su caravana de palabras. En Estrella Nueva y Palocabildo, dos veredas de Jericó, la escritura tomó forma entre manos que bordaron la memoria del río, entre niños que crearon paisajes de papel. En el Parque principal del municipio, además de que también se bordó la memoria, se habló del río y de los libros que se lanzaron en el Hay, la Móvil dispuso de manera permanente historias para lectores sin afán, y en los rincones del pueblo, las voces de los mediadores buscaron oídos atentos: un regalo de lectura en voz alta bajo el sol de la tarde.

Exposición Soberanía y diseño

Para cerrar, destacamos la espontaneidad y el valor del diseño en la ruralidad con la exposición Soberanía y diseño. Esta pieza museográfica "refleja al mismo tiempo el conocimiento del lugar, del recurso y del uso del objeto: una escoba, una escalera, una aguja, una silla, entre otros". Resalta el ingenio popular, la capacidad que tenemos de construir objetos y soluciones a nuestra medida.

Esta exposición, que estuvo durante tres días en el parque de Jericó, fue creada a partir de los dibujos de objetos de la ruralidad que Patricia Córdoba y José Ignacio Vélez plasmaron hace cuatro décadas en su recorrido por Antioquia, Córdoba y Chocó, cuando eran estudiantes de diseño industrial.