Prepárate para una travesía por las memorias vivas de la ciudad, guiados por la mirada atenta y entrañable del periodista, escritor y docente, Juan José Hoyos. Caminaremos por el centro de la ciudad, luego iremos al mirador del Cerro El Picacho en la zona noroccidental, para terminar en Aranjuez. El Metro de Medellín será el hilo conductor, aunque el azar también nos acompañará, algunos de los puntos del recorrido serán elegidos por la mayoría del equipo según sus intereses.
Método del recorrido LEO: leer y observar
En algunas paradas leeremos crónicas del Cuaderno de la memoria. Ella cantaba boleros y otras crónicas, título 170 de Palabras Rodantes, una compilación de 24 textos de Juan José Hoyos publicados entre 1980 y 2022, quien además de pintarnos imágenes instantáneas, nos llevará por viajes profundos porque el periodismo narrativo para él nace de la búsqueda del otro, partiendo de la idea de que este periodismo es la raíz de un árbol.

Así pues, escucharemos en algunas paradas la voz de este cronista y el latir de la ciudad en el pasado a través de sus historias. El método que proponemos es leer y observar.
Previsualiza y explora el recorrido en este mapa
1. El centro de la ciudad
El punto de encuentro es la Plaza de la Luz, más conocida como el Parque de las Luces, donde anteriormente se ubicaba el mercado cubierto de Guayaquil. Ingresaremos a la Biblioteca EPM y allí leeremos La última muerte de Guayaquil (p. 41. Recordaremos leyendas y personajes célebres del punto de mayor convergencia de la ciudad en tiempos en que aún no existía el Centro Administrativo La Alpujarra.
De la Biblioteca nos iremos caminando por la avenida Carabobo hasta la Plaza Botero. Este camino será el momento de contrastar los relatos de la vieja Medellín, según Juan José, con la música, pregones, voces, movimientos y sensaciones de la cultura popular que palpitan actualmente en estas calles.
PD: Para quienes quieren conocer un poco más del centro de Medellín, les recomendamos leer antes del recorrido El Café Versalles: una leyenda de medio siglo (p. 87). Y quienes queden antojados de caminarlo más, les recomendaremos algunos cafés, heladerías, grills, teatros y otros “centros de educación sentimental”, para que conozcan el milagro de la media luz del que nos habla Juan José en sus crónicas. Lugares que fueron cruciales para los primeros noviazgos y el descubrimiento del amor.
2. La ciudad a lo lejos
Al lado de la Plaza Botero tenemos la estación Parque Berrío del Metro, desde donde iremos rumbo a la estación Acevedo, allí transbordaremos a la Línea P del Metrocable, nos bajaremos en la estación El Progreso y caminaremos 15 minutos para lograr una vista de toda la ciudad en el cerro El Picacho, uno de los siete cerros tutelares de Medellín. A 2.100 msnm leeremos Una ciudad amurallada (p. 21) mientras vemos cómo el valle angosto sostiene la ciudad y cómo las casas se trepan sobre las laderas, los cerros multiformes (algunos escarpados y puntiagudos), y comprenderemos cómo esta geografía moldeó el carácter de los habitantes que, para salir al mundo, primero debieron levantar la cabeza por encima de estas montañas.
3. La muerte y la vida
En el recorrido de regreso al Metro, escucharemos la lectura en voz alta de Yo soy el cantante (p. 197) para rematar escuchando la canción que lleva el mismo nombre en la voz de Héctor Lavoe. Para este momento, el grupo del recorrido deberá tomar una decisión, terminar el recorrido en el Cementerio Museo San Pedro o ir a la Casa Gardeliana. En ambos casos nos podemos bajar en la estación Hospital. Para el Museo basta cruzar un par de calles. Para ir a la Casa, debemos hacer trasbordo a la Línea 1 del Metroplús y bajarnos en estación Gardel.
Llegando al punto elegido también habrá que tomar una decisión: leer El ataúd de Gardel (p.101) y conocer toda la travesía que hizo hasta llegar a Buenos Aires, pasando por Caramanta, Supía, Buenaventura y Nueva York. Además de la relación de su sepelio con la masonería.
O conocer un poco más a fondo las transformaciones de los barrios de Manrique y Aranjuez, pasando por la nostalgia y la memoria que generan en Juan José, que vivió sus primeros años en esta zona, leyendo Aranjuez: de vuelta al barrio (p.107) y Viendo caer las flores de los guayacanes, otra vez (p.219). O si el grupo quiere conocer más sobre la violencia y el narcotráfico que se vivió en la nororiental, leeremos Los muchachos de la 45 (p. 75).
Recomendaciones para el recorrido
Trae zapatos cómodos. Buena hidratación. Sombrilla. Disfruta de las gafas de conocer la ciudad en su cotidianidad. Gente, lugares, historias. Como Juan José usa la escritura de lentes para ver el mundo, puedes pedírselos prestados durante el recorrido. Procure antes de tomar una foto, experimentar la ciudad que Juan José propone en sus crónicas, disponiendo el corazón a lo otro, al otro, a otro tipo de historias. Ah, y no guardes afanes.
Epílogo
La vocación de contar y la sabiduría del corazón
Escuchar, ver y leer a Juan José es encontrarse con la esperanza. Hay nobleza en sus gestos, palabras, historias y mirada del mundo. Por eso, la invitación es a leer y conocer su vida y obra antes del recorrido. Para esto, encontrarán al final de este artículo, una lista de sus publicaciones: novelas, compilaciones de crónicas y textos sobre periodismo narrativo que pueden prestar en las Bibliotecas Comfama.

En el prólogo del título 170 de Palabras Rodantes, donde el periodista, escritor y editor del libro, Alfonso Buitrago, nos arma una breve biografía del autor que recorre sus publicaciones, el devenir de sus oficios como periodista, escritor y docente universitario. Y cómo la premisa de abandonarse a “la sabiduría del corazón”, ha sido su faro para abordar los fuertes acontecimientos y cambios de esta ciudad.
Conocer la obra de Juan José es adentrarse en la historia profunda de Medellín como ciudad y acontecimiento, que en su mirada es un universo ardiente que tiene muchas historias entramadas con la capacidad de convertir la tristeza en alegría.
¡Esperamos también disfruten del viaje que es leer a Juan José!
*Fotografías por Karin Richter Gómez, fotógrafa y artista plástica de Medellín. Encuentra el fotorreportaje completo aquí: Juan José Hoyos, recorrer el barrio con el cronista

.png?u=https%3A%2F%2Fimages.ctfassets.net%2Fjecnfi8tljxk%2F7c9LclxthZ2HxT8iCgDYvQ%2F37a8daed8d6b7440c7eac767f986511e%2F0_Cabecera_Palabras_Rodantes__1_.png&a=w%3D218%26h%3D148%26fm%3Dpng%26q%3D80&cd=2025-10-24T18%3A28%3A38.353Z)
.png?u=https%3A%2F%2Fimages.ctfassets.net%2Fjecnfi8tljxk%2F7c9LclxthZ2HxT8iCgDYvQ%2F37a8daed8d6b7440c7eac767f986511e%2F0_Cabecera_Palabras_Rodantes__1_.png&a=w%3D870%26h%3D590%26fm%3Dpng%26q%3D80&cd=2025-10-24T18%3A28%3A38.353Z)


.png?u=https%3A%2F%2Fimages.ctfassets.net%2Fjecnfi8tljxk%2F4VtftBUGBJ5zn0uEC3s1MI%2F0d1f96196221738b3e3bf301b399073b%2FMedidas_portadas_de_libros__7_.png&a=w%3D510%26h%3D680%26fm%3Dpng%26q%3D80&cd=2025-10-28T16%3A14%3A35.293Z)


.png?u=https%3A%2F%2Fimages.ctfassets.net%2Fjecnfi8tljxk%2F48LRavJO14UCaXs52j8vR3%2F052f587da5c728a978c508fa8083c90f%2FMedidas_portadas_de_libros__3_.png&a=w%3D510%26h%3D680%26fm%3Dpng%26q%3D80&cd=2025-10-28T16%3A19%3A34.097Z)
.png?u=https%3A%2F%2Fimages.ctfassets.net%2Fjecnfi8tljxk%2F2I7vJMsoampG7BedQ6RtLp%2Fd5161af915240be13e763d50998222da%2FMedidas_portadas_de_libros__6_.png&a=w%3D510%26h%3D680%26fm%3Dpng%26q%3D80&cd=2025-10-28T16%3A21%3A03.337Z)
.png?u=https%3A%2F%2Fimages.ctfassets.net%2Fjecnfi8tljxk%2F4kInq9Ve5GtsR89tzSHKBk%2F4b584e37505da53c0da2e4f5d01b9db3%2FMedidas_portadas_de_libros__5_.png&a=w%3D510%26h%3D680%26fm%3Dpng%26q%3D80&cd=2025-10-28T16%3A22%3A26.793Z)


.png?u=https%3A%2F%2Fimages.ctfassets.net%2Fjecnfi8tljxk%2F4TjpWDPrCxhe8zXN35qj0W%2F8893bd4986f8646cdc75e5bc91b5b010%2FCabecera_Se_dice_r%C3%ADo__1_.png&a=w%3D870%26h%3D590%26fm%3Dpng%26q%3D80&cd=2025-04-30T22%3A47%3A04.241Z)