En este laboratorio imaginamos el futuro, damos saltos en el tiempo para crear colectivamente narraciones sobre lo que será la vida en los años por venir.
El público y las invitadas e invitados estarán sentados en una mesa redonda que estará cubierta con papel. Todas las personas tendrán a su disposición herramientas para intervenir en este soporte: lápices, colores, crayolas, plastilina, recortes de revistas, etc.
Cada conversador tendrá un espacio de 30 minutos para hablar sobre el tema de su dominio. En esta ocasión los temas son:
Los 30 minutos estarán divididos en tres saltos temporales: 20 años, 50 años y 100 años. Es decir, cada ronda temporal tendrá diez minutos para hablar de su tema. Un miembro de nuestro equipo llevará la cuenta del tiempo y dará la señal para hacer el salto temporal.
Este laboratorio no pretende ser un espacio académico, es un espacio lúdico, de conversación, en el que esperamos se permitan imaginar cualquier escenario posible. En resumidas cuentas, será contar una historia que se anticipe al futuro por cualquier camino posible: fantástico, oscuro, luminoso, optimista, apocalíptico, absurdo, esperanzador, o el que ustedes elijan para aguijonear la imaginación de quienes estaremos escuchando.
También tendremos el acompañamiento de un ilustradores, quienes nos ayudarán a dar pinceladas que le den hilo y cohesión a este mapa colectivo.
Además, contaremos con la presencia de una relatora que tiene la tarea de unir en un relato las tramas de la conversación.

