La palabra ‘ahorro’ tiene origen árabe. Sí, de la palabra ‘hurr’ que significaba ‘libre’. Así que ‘ahorrar’ comenzó a utilizarse en la Edad Media como significado de “dar libertad a un esclavo o a un prisionero”.
Este arabismo fue mutando a “librar a alguien de algo” y luego, incluso, significó “desnudarse”. Con el paso del tiempo fue tomando su connotación actual “guardar ingresos”.
Ahora la pregunta es: ¿guardas tú ingresos?, ¿es el ahorro un hábito personal y familiar? Luego de este contexto queremos reflexionar sobre este tema: ¿cuál es tu #PoderAhorrador?
¡Responde con confianza!