¿Qué tipos de contratos laborales aplican en Colombia?
¿Qué tipos de contratos laborales aplican en Colombia?
Te explicamos los diferentes tipos de contratos que se aplican en Colombia, para que puedas elegir el que mejor se adapte a las necesidades de tu empresa.
Contrato de trabajo a término indefinido: es aquel que no tiene una fecha de finalización estipulada. Esto significa que puede durar indefinidamente, a menos que sea terminado por alguna de las partes. Este tipo de contrato puede celebrarse por escrito o de forma verbal.
Contrato de trabajo a término fijo: se caracteriza por tener una fecha de inicio y de terminación que no puede superar los tres años. Es fundamental que sea por escrito y puede ser prorrogado indefinidamente cuando su vigencia sea superior a un año, o cuando siendo inferior, se haya prorrogado hasta por tres veces.
Contrato por obra o labor: es un acuerdo entre un trabajador y un empleador por el cual el trabajador se obliga a realizar una obra o labor determinada, a cambio de una remuneración. Este tipo de contrato es común donde se requiere la contratación de personal para realizar un proyecto específico.
Contrato civil por prestación de servicios: es un acuerdo entre una empresa y una persona (natural o jurídica) especializada en alguna labor precisa. La remuneración se acuerda entre las partes y no genera relación laboral, por lo que la empresa no está obligada a pagar prestaciones sociales. La duración del contrato también se acuerda entre las partes, dependiendo del trabajo a realizar. El empleado recibe un sueldo al cual se le descuentan únicamente los impuestos correspondientes.
Contrato de aprendizaje: es un acuerdo entre una persona natural, llamada aprendiz, y una empresa, llamada patrocinadora. El aprendiz recibe formación teórica y práctica en una entidad autorizada, a cambio de que la empresa le proporcione los medios para adquirir formación profesional requerida en el oficio, actividad u ocupación. El contrato tiene una duración de uno a tres años, y el aprendiz recibe un apoyo de sostenimiento mensual, que es como mínimo el 50% de un salario mínimo mensual vigente durante la fase lectiva y el 75% durante la fase práctica.