Moravia se Pinta de Vida con Fundación Pintuco
27 de Octubre 2020
Si miras con especial cuidado al nororiente de Medellín, encontrarás un barrio lleno de color, con casitas arrejuntadas y calles ruidosas que son símbolo de resistencia. Le llaman Moravia, que significa amor a la morada, y es justamente ese amor de los habitantes a su territorio, el que logró convertir un basurero municipal en un jardín lleno de vida y resiliencia.
El historiador Néstor Armando Álzate narra en su libro La Bella Villa, cómo campesinos desplazados por la violencia, infundidos por el miedo y la incertidumbre, llegaron a la ciudad y se dedicaron a vivir de los desechos, asentándose alrededor del basurero. Cuando el espacio se hizo insuficiente, las personas que llegaban erigían sus hogares sobre el basurero, poblando poco a poco lo que hoy se conoce como Moravia.
Fachadas inertes reposaban en el pasado sobre las calles del barrio, pasando completamente desapercibidas. Estaban ahí pero nadie las notaba. Por lo menos no hasta que el color hizo de las suyas y las devolvió a la vida. Fundación Pintuco llegó a Moravia para inundar las calles de color y arte, convirtiendo aquellas fachadas en enormes lienzos.

Esas mismas calles de Moravia fueron las que vieron nacer y crecer a Ángela Holguín, una mujer que, inspirada por su madre, lucha incansablemente por generar un impacto positivo dentro de la sociedad. Ángela ha sido testigo del cambio que ha tenido Moravia. Recuerda su niñez en familia rodeados por la basura, un tesoro para ellos de donde, en ese entonces, se aprovisionaban de alimento y juguetes.
Hoy es una líder comunitaria de Moravia, quien vio en su barrio un gran potencial para hacerlo florecer de los desechos. La Fundación Pintuco ha sido un aliado fundamental durante ese proceso de transformación social a través del color.
Para Ángela, sin lugar a dudas, hubo un Moravia antes y después de la fundación. Actualmente, da recorridos a extranjeros y locales por el barrio con Moravia Tours, iniciativa de la que es cofundadora y que busca contar la historia de transformación que ha vivido Moravia.

Ángela agradece el gran impacto social, cultural y económico que ha tenido el territorio gracias a las intervenciones de Pintuco, mejorando además el turismo en el barrio.
El mal olor, la violencia y varios incendios, han sido obstáculos que los moravitas han superado por amor a su barrio. Aquel basurero municipal, se ha convertido en el jardín más grande de la ciudad y atraviesa actualmente un proceso de descontaminación ambiental, donde el color ha sido un vehículo de sostenibilidad y desarrollo.

Transformar Vidas con Color: Fundación Pintuco
Fundación Pintuco busca generar una transformación social a través del color, promoviendo la sostenibilidad del hábitat mediante estrategias sociales que propicien la convivencia, apropiación y fortalecimiento de tejido social en las comunidades.
Según Miguel Ayala, Director Ejecutivo de la fundación, estos procesos buscan vincular a la población bajo un objetivo que va más allá de la estética. Mejorar la calidad de vida, la percepción del entorno, las relaciones dentro de la comunidad y mover la economía local, son solo algunos de los beneficios que traen consigo este tipo de intervenciones.

Miguel hace énfasis en que el proyecto se lleva a cabo con la comunidad y no para la comunidad. Para él, es fundamental integrar a los ciudadanos en la planeación y desarrollo, para que sea efectivo el modelo de sostenibilidad comunitaria. Cuando las poblaciones hacen parte activa de la transformación de su barrio, la conversación se enriquece y cambia, generando una cohesión social y fortaleciendo el sentido de pertenencia.
La fundación transforma viviendas, instituciones educativas y áreas comunes, donde la pintura es una excusa para detonar cambios comunitarios. Además de formar tejido social, construyen memoria, hechos de reconciliación, generan inclusión y oportunidades económicas para las comunidades.

Es el caso de Moravia, por cuyas calles día a día se pasean turistas y curiosos que, incrédulos, desean conocer esa historia de transformación social lograda a través del color, el empoderamiento y el sentido de pertenencia.
* Fotos cortesía de Ángela Holguín y @urbanlabmedellin