Logo Comfama
Ayuda

La atracción de los polos opuestos: ¿existe un camino político más allá de la polarización?

Polarización política
La atracción de los polos opuestos: ¿existe un camino político más allá de la polarización?

La polarización ha descrito buena parte de la dinámica política en Colombia en los últimos años, como si solo existieran dos sectores radicalmente enfrentados, sin matices. En función de propiciar conversaciones indispensables y abiertas, a propósito de la coyuntura, surge #ConversacionesPosibles, un espacio para activar el diálogo y la comprensión de diversas miradas, en el que validamos al otro como interlocutor. 

El paro nacional dejó de ser una marcha motivada por el descontento frente a una reforma tributaria, para ser lo que Juan David Ortiz describe como un descontento generalizado por parte de una generación que se ha sentido excluida en el debate político y en la toma de decisiones. 

¿Será que sí es tan problemático que haya una sociedad polarizada? O el problema radica en reducir el debate político con esa palabra, cuestiona Juan David. “Yo pienso que la sociedad en general se debe regir por unos principios mínimos que deben convertirse en defensas radicales, por ejemplo, por los derechos humanos, por la vida, por la integridad de las personas, por la dignidad humana. Ahí no hay puntos medios, no hay matices, no se puede hablar de que haya posturas que difieran de esos principios básicos”, afirma Sara Jaramillo, representante estudiantil de la Universidad de Medellín. 

Opina también que cuando partimos de la construcción política, social y económica que implica cualquier país, “es cuando uno se da cuenta de que realmente la polarización es tener un ideario del mundo que te encasilla, como que no cedes al respecto y crees que el mundo es blanco o negro y no hay una amalgama de grises en la que nos podamos encontrar como seres humanos. Las causas y los debates se han abordado desde ver al otro como enemigo y no como un interlocutor válido”. 

Para Juan David hay aspectos que no son negociables, como la dignidad o la vida de los otros. “Hay unos discursos racistas, discriminatorios y, a veces, se responde a eso con que toda opinión es respetable, ¿y será que es respetable?”. 

Al respecto, Jorge Caraballo, editor de crecimiento de Radio Ambulante, opina que el Estado está fundado en el respeto y en la dignidad, y debe hacer respetar las diferencias y opiniones de cada uno, como está declarado en la Constitución política. “En este Estado pluralista hay lugar para todos. No importa qué piense usted mientras no incumpla ni viole esos principios que están allí. (…) entonces, por supuesto que no todas las opiniones son válidas si alguna de ellas está atentando contra esas libertades, esos derechos de otro”. 

Además, Jorge siente que nos estamos inventando estos bloqueos para dejar de entendernos como sociedad. “Creo que el concepto de polarización cumple un rol clave para para levantar esas distancias que lo que hacen es que evitemos esas conversaciones difíciles, porque es que si somos diferentes es normal. Es natural que las interacciones sean difíciles, pero para eso nos organizamos en Estado, precisamente para que todos quepamos en ese lugar”. 

Escuchar, entender y abrazar las diferencias 

Polarización política

José Jaime Vélez, gerente de Visualiza, desde su rol como empresario, opina que respecto al momento tan difícil que estamos pasando en el país, todos deberíamos tener una bandera, una que saquemos en todos los escenarios en los que estemos y es la bandera del bien común. “Lo clave, lo duro, lo complejo, es cuando personalizamos la polarización, cuando le damos nombre, apellido a la polarización y cada uno de nosotros toma un bando como si el otro fuera mi enemigo”. 

Para Sara Jaramillo el problema, más que en la polarización, radica en la intolerancia, lo que nos ha llevado no solo a no reconocer al otro, sino a buscar anularlo por vías de hecho. “Yo creo que realmente en el uso de la palabra polarización es muy simplista, ha hecho que los debates se centren en las mismas ideas, en los mismos tres caminos. Ni siquiera nos da esa esa posibilidad de tener una apertura de muchos caminos, de entender el país en su heterogeneidad, en su complejidad”. 

José, agrega, además de las opiniones de los demás panelistas, que “carecemos de escenarios de participación. Creo que es uno de los elementos más relevantes también y que siguen polarizando. Muchas personas en las marchas encontraron el camino para decir lo que querían decir en la calle porque no hay otros espacios para decirlo”, y siente también que las marchas perdieron sentido cuando ya no había un único foco, sino que eran cientos de demandas.  

“Es que nos damos cuenta de que no hay una demanda, de que no hay un malestar, de que no hay un solo problema; esto lo que está haciendo es como tocando el dolor y por ahí empiezan a salir un montón de síntomas y claro, suena desordenado, caótico, estoy de acuerdo, pero eso no hace que pierda sentido, todo lo contrario, demuestra que el problema es mucho más grande de lo que creíamos", responde Jorge Caraballo. 

Por el contrario, Sara Jaramillo considera las calles como un “escenario legítimo y que se convierte también en un escenario de participación muy fuerte para demostrar la rabia y la indignación. Yo creo que también hemos caído en un debate muy circular, y deslegitimamos lo que va detrás de la rabia y la indignación de las marchas. En últimas yo siento que los ejercicios que se han dado a raíz de todo esto del paro nos siguen sacudiendo todas las bases. También nos han puesto a pensarnos la ciudad y el país”. 

Para culminar este espacio de diálogo y como conclusión sobre la realidad que atraviesa el país, José Vélez afirma que es necesario dejar de ver al otro como competencia, en su caso en el gremio empresarial. Lo ideal es “construir, ver qué hace bien el otro y qué hago bien yo y cómo podemos unir fuerzas para generar y construir en colectivo y por el bien de todos, cómo de ese tipo de experiencias, desde las distintas miradas podemos sumar. La bandera del bien común siempre tiene que estar”. 

Te invitamos a revivir este encuentro: