1. Estamos en los territorios porque creemos que los lenguajes: la palabra, la escritura, las artes, la música, el teatro, el cine, la fotografía, la ciencia, transforman y conectan intereses, personas y espacios.
2. Generamos emociones que abren puertas a renovados conocimientos y preguntas; para ampliar saberes desde la palabra, el idioma, la experimentación y el juego.
3. Avivamos la sorpresa y entregamos herramientas para estimular la inspiración y dar nuevas lecturas a la cotidianidad de las comunidades: personas, familias, empresas, regiones, que acercamos a conocimientos presentes en libros, calles, internet, paisajes, ciudades, barrios o en las mismas personas.
4. Creemos que las bibliotecas son un camino para enriquecer conversaciones que permitan a las personas imaginar y crear nuevos relatos y mundos posibles, o imposibles, pero siempre mágicos y reveladores, en los que la experimentación y el error se entienden como necesarios para los procesos de aprendizaje.
5. Sabemos que la diversidad es nuestra mayor riqueza y que para consolidar una sociedad consciente, libre, productiva y feliz, son necesarios espacios incluyentes, en los que desde la diferencia sea posible construir horizontes para todos, en los que se dé el intercambio de identidades, saberes, ideas, etnias, géneros y generaciones. Lugares en cuyo centro esté la pulsión creativa, la reflexión, los encuentros, la escucha permanente y la construcción colectiva.
6. Las bibliotecas Comfama existen para tender puentes entre las personas y el universo y para iluminar un camino en el que la cultura ofrece y construye perspectivas, genera narraciones propias y da valor a las existentes. Conectamos personas y comunidades con múltiples saberes, lenguajes y posibilidades.
7. Consideramos las bibliotecas como el símbolo de la cultura en Comfama, las pensamos como centros culturales que, más allá de la disposición y entrega de información o conocimiento, ejercen un liderazgo en los procesos de educación y aprendizaje de la región. Son el tercer lugar, el del encuentro, en el que cada uno es y se proyecta a través del lenguaje común y universal para todas las personas, el de la creación.
8. Aquello que contribuye a que la vida cotidiana sea más bella, tiene lugar en las bibliotecas Comfama. Esta declaración de amor a la vida implica estar abiertas a las expresiones culturales de los territorios, reconocer las culturas diversas, estimular el intercambio de visiones del mundo y entender que cada persona es parte de un universo inmenso que genera responsabilidades y que abre horizontes.
9. A los espacios bibliotecarios son llamadas y bienvenidas las comunidades sin preferencia o discriminación racial, religiosa, etaria o política. Todos los recursos, proyectos, agendas y servicios son construidos y pensados para los trabajadores afiliados a la Caja, para sus familias y, en general, para quienes buscan ampliar su mundo, generar nuevas conexiones o renovar las existentes, entender su pasado y enriquecer la forma en la que enfrentan y viven su presente, por medio de nuevos conocimientos o estímulos para el aprendizaje.
10. Nuestras bibliotecas Comfama son el lugar donde la educación y la cultura se expresan, en los que la comunidad encuentra espacios y tiempos para la conversación, para el disfrute de las artes, para conocer más acerca del ser humano y de la vida más allá de las fronteras geográficas; son la conjunción de distintos y diversos mundos: el de la palabra y los lenguajes, el conocimiento, el juego y la experimentación, el de la imaginación.